No hace tanto tiempo se amenazaba con la crisis de las pensiones de la Seguridad Social y se nos incitaba a asegurar nuestra jubilación con Fondos de Pensiones. Algunos nos negamos a ello, porque mejor el Estado que los bancos para garantizar este derecho. La propaganda por parte de los medios de comunicación y sus voceros de la mano inefable del PSOE de González insistían en que esa era la mejor solución. Comenzó una campaña por parte de los bancos, que veían el suculento negocio que complementaría a la maltrecha Seguridad Social. ¿Se acuerdan de todo eso?
Es más, al trabajador que tenía algún dinero ahorrado los bancos le asaltaban constantemente, amenazándole con que estaba perdiendo dinero y que debía trasladarlo a un Fondo de Inversión Garantizado (¿por quien? Eso no lo decían) y así miles y miles de personas honradas desviaron una buena parte de sus ahorros a ¡la bolsa!. Como consecuencia de esta situación los gurús del Capitalismo comenzaron a hablar del capitalismo popular y el PP quería representar a 8 millones de accionistas en este país.
Ahora la burbuja especulativa ha explotado. La economía capitalista se ha hundido y todo ese dinero se ha evaporado. ¿Es el fin del capitalismo? Obviamente no. Al final, que nadie dice cuando es, se sale. Pero de todo este marasmo las pérdidas serán de esos 8 millones de accionistas y los beneficios de unos pocos. A quien le falten un par de años para jubilarse debería mirar como va su fondo de pensiones y cuanto dinero lleva perdido en estos meses. Quien tuviese allí su dinero para pagar los estudios de sus hijos, su jubilación, o para alguna urgencia (que siempre las hay) lo puede dar por perdido. Claro que al final siempre se gana, seguro que eso piensan los de siempre.
1 comentario:
Buena reflexión. Un saludo.
Publicar un comentario